lunes, 23 de enero de 2012

DESTELLOS DE FUTURO

Después de aquel debut impresionante, en Brasil sólo se hablaba de eso. Bueno de eso y de la indisposición de Ronaldo en la final del mundial 98. Los brasileños somos muy nuestros, vaya.

En esa semana pasó algo que me marcó trágicamente. Yo era muy fan de las series, y esa semana murió Marcial el de Médico de Familia. Lloré, lo pasé realmente mal, pero me propuse mejorar cada uno de mis atributos para honrar la muerte de aquel hombre que me había hecho tan feliz. Curiosamente, fue morir Marcial y empezar a deteriorarse la calidad de Telecinco, hasta convertirlo en la real mierda que son ahora.

Decidí que ese día no iba a entrenar, en señal de luto, pero, recibí una inesperada visita a mi casa. Apareció Ximelez, con su coche con alerón, una de Pastis & Buenri, una litrona en la guantera, un paquete de Celtas Cortos debajo de la figurita de la Virgen y me dijo que había que superarlo, que a él la muerte de Chanquete también le marcó, pero trata de superarlo con su impresionante fútbol. Curiosamente, también tenía el típico rosario colgado del retrovisor, que se movía cada vez que los graves de Pastis & Buenri apretaban.

Paramos a comprar unas patatas Matutano y unos chicles Boomer en un Continente. Para después del entrenamiento reponer fuerzas. El cabrón sabe como hacer reir, me contó un chiste de un perro que se llamaba Mistetas que jamás en mi vida lo había oido y me desñoclé.

Llegamos al entrenamiento y recibimos una llamada de El Mono Burgos. Quería otro amistoso, pero puso como condición que no jugara yo. Cabronazo. Mi entrenador no aceptó, creo que era colega de Figo, así que el pelotazo en la cara no fue casualidad. Ahí lo dejo.
Practicamos jugadas ensayadas en ese entrenamiento. Recuerdo que le metí goles de todo tipo a Ivarov. De rabona a lo Di María, de tacón a lo Toquero, de cabeza a lo Morientes y de pecho a lo Ronaldo. Recuerdo que le tiré un penalty, con gran potencia, y el cabrón lo despejó a corner. Me miró desafiante y dijo : "Jodete, Castolov joputen..." en un perfecto ruso agitanao. Al día siguiente le dolían tanto los dedos que no vino a entrenar. Bueno, también nos enteramos que sufrió un esguince de muñeca y fue baja durante un mes. Probamos con el portero suplente, no me acuerdo como se llamaba, era como El Imbécil de Manolito Gafotas, pero el cabrón era tan malo que al segundo día pusimos un cono de portero. Sólo le marcaba goles yo al cono.

Tras un tiempo en la Academia, recibimos la visita del que decían era el ídolo de la mayoría de mis compañeros, uno de los mejores jugadores brasileños de la historia. ROMARIO.
Sinceramente, a mi no me defraudó, cuando dijeron "jugadores" estaba pensando en Sharon Stone y entendí "Relaciones Públicas". Esa noche de borrachera, Romario cumplió todas mis espectativas. El tío se portó, creo que se gastó 70000 Reales esa noche entre copas, condones, hierba y fulanas. Lo pasamos de miedo. Minanda nos confesó al día siguiente que le dolía el culo y que su cuerpo olía a Massimo Dutti. Romario también olía a esa colonia. Curioso, eh?

Llegué a casa dos días después, tenía las maletas en la puerta. Mis padres me habían echado.

CONTINUARÁ

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